1. Arándanos
Los arándanos no solo son buenos para las personas, también pueden ser altamente nutritivos para nuestros amigos felinos. Asegúrate de lavarlos bien para eliminar residuos de pesticidas y tierra. Para que tu minino quiera comer los arándanos, quizás córtalos en trozo o dáselas congeladas.
2. Manzanas
Mientras le saques la cáscara, cuesco y semillas completamente, está bien que tu gatito coma pequeños trozos de esta fruta.
3. Frutillas
Frescas o congeladas, en puré, con semillas o las hojitas, las frutillas son una fruta segura y no tóxica que se le puede dar a los gatos en pequeñas cantidades.
4. Melón
A tu minino quizás le gusta comer melones tanto calameño como tuna cuando están en temporada. Solo dáselo sin semillas ni cáscara.
5. Sandía
Otra fruta popular es la sandía. También deben removerse las cáscaras y las pepas antes de ofrecérselo a tu minino. Quizás le gusta saborear el juguito.
6. Plátano
Si tu gato se ve interesado en los plátanos, puedes ofrecerle pequeñas piezas. Quizás darle un trozo congelado o molerlo para que quede cremoso.
7. Arándano rojo
Quizás ni lo sabes y el pellet que le das puede contener restos de arándano rojo, ya que ayuda a mantener el tracto urinario saludable. Si quieres ir un paso más allá, puedes preguntarle a tu veterinario si puedes ofrecerle pequeños trocitos de este fruto.
8. Peras
Si a tu gato le interesan las peras, ten en cuenta de sacarle la cáscara y las semillas. Solo dale un pequeño trozo de la carne de la pera, ya que las semillas son tóxicas.
9. Piña
La piña es otra futa que tu gato podría disfrutar en pequeñitas cantidades. Sácale la piel y las durezas para que pueda disfrutar el juguito de la carne. Ten en cuenta que algunos gatos pueden ser alérgicos a la piña.
10. Mango
¿Tu gato intenta robarse tu mango? Mientras le hayas sacado la cáscara y el centro, puedes ofrecerle una probadita.
Pequeñas porciones están bien
No importa qué fruta le ofrezcas a tu gato, los expertos recomiendan solo darle a tu gato una pequeña cantidad. Si tu gato come de forma balanceada, está obteniendo los nutrientes diarios que necesita, y la fruta puede ser una golosina ocasional. En todo caso, siempre es el veterinario el que te debe guiar en la dirección apropiada en lo que respecta a darle o no darle una comida.
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