Sabias que los gatos negros son los menos adoptados porque su color está unido a supersticiones relacionadas con la mala suerte. ¡Nosotros te contaremos por qué deberías adoptarlo!
Son muchos los estudios que afirman que los gatos negros son los menos adoptados en refugios y protectoras únicamente por el color de su pelaje, al vincularse a multitud de creencias y antiguas supersticiones relacionadas con la brujería y la mala suerte.
No obstante, se trata de un felino más que no tiene la culpa de las creencias populares pero que sí las sufre. Además, son tremendamente bellos, sólo debemos despegarnos de nuestros prejuicios y supersticiones para darnos cuenta.
1. Porque se merecen una oportunidad
Los gatos negros son un gato más, exactamente igual que uno blanco, gris o multicolor. Sin embargo, la mayoría de las veces son los últimos en ser adoptados, viendo limitada su vida a vivir sin un hogar o en los peores casos en la calle luchando por encontrar algo que comer.
Ellos, como cualquier otro animal que carece de todas sus necesidades básicas, merecen una oportunidad.
2. Mira su personalidad por encima del color
La personalidad de un gato se ve diferenciada por diferentes factores, algunas propias de su raza (los gatos persas, ragdoll o cartujo son más mansos que los europeos), su propia forma de ser y sus vivencias (en el caso de los gatos callejeros).
Sin embargo, en ningún aspecto destaca el color del pelaje como elemento significativo del carácter de un animal, de la misma manera que tampoco lo es con las personas.
3.Son exóticos y elegantes
Si dejamos de lado nuestros prejuicios y supersticiones respecto a los gatos negros y los analizamos desde un punto de vista racional, no podemos negar que el gato negro es un animal tremendamente bello.
Los gatos negros son más exóticos y tienen un porte elegante, como el de una pantera negra en miniatura. Además su pelo negro suele ser muy brillante y hace destacar aún más el color de su ojos.
4. Animales sagrados en el antiguo Egipto
Si todavía no te fías del todo porque la superstición está muy arraigada en ti... ¡te recordamos que los gatos negros eran animales sagrados en el Antiguo Egipto!
Los gatos negros eran adorados por las personas y estaban relacionados con el culto a las divinidades. Cuando un gato negro fallecía, los miembros de la familia pasaban a vestir de luto en señal de duelo por la pérdida de su compañero felino.
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