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Encontré un gatito recién nacido huérfano ¿Qué hago?


De seguro te has encontrado con gatitos abandonados, de pocos días o semanas de vida deambulando en la calle ¿Cómo proceder para que sobreviva y se mantenga sano? Aquí te informamos.

Siempre lo mejor para un gatito tan pequeño es que esté con su madre, si podemos mantener a ambos sería lo más adecuado, pero hay ocasiones en que la madre fallece o fueron botados a la calle, en estos casos nuestra intervención es clave para su vida.

Lo primero es identificar la edad aproximada que tiene, un indicador de que es un pequeño de días es que tenga los ojos cerrados, (entonces debe tener entre siete y catorce días de vida).

Si tienes la oportunidad de acudir a un veterinario, hazlo, él podría identificar mejor su estado de salud.

Debemos mantener la temperatura adecuada para su existencia, ya que al ser tan pequeños no pueden regular bien la temperatura corporal, esa responsabilidad recae en la madre y al no estar, nosotros debemos velar por ello. Podemos cargarlo en brazos y arroparlo.

Puedes utilizar toallas o botellas de agua caliente envueltas.

También tenerle un espacio cálido y que le brinde seguridad. Puedes utilizar una cajita o cesto ubicado en un lugar tranquilo de la casa donde lo puedas observar.

Su alimentación se basa en leche materna, existen leche de fórmula especial para estos gatitos que también le llaman leche artificial maternizada, se compra en tiendas de mascotas y clínicas veterinarias.

No le ofrezcas leche de vaca o alimentos lácteos humanos, dado que su estómago no es lo suficientemente maduro y no está preparado para recibirlos. Podría desencadenar una deshidratación y potencial muerte.

Mientras no encuentres leche especializada puedes administrarle agua tibia en un gotero, para saciar su sed.

Cuando tengas la leche:

  • Debe estar a temperatura corporal tibia.

  • La frecuencia debe ser cada dos horas, de a poco ir espaciándolas a tres o cuatro.

  • Su mamadera debe asemejarle al pecho de su madre. Se administra de manera diagonal, mientras el gatito debe mantener una posición horizontal.

  • Debemos fijarnos en que no le entre aire al succionar y que el agujero del chupete sea adecuado para que salga una cantidad adecuada de leche.

Cuando el gatito se quede dormido es porque está saciado. Algunos especialistas sugieren que los hagamos eructar con delicadeza, poniéndolos en nuestro hombro, similar a lo que hacemos con los bebés.

El cambio de la leche al alimento sólido. Lo más recomendable es que acerquemos al gatito de a poco a la comida, ofreciéndole primeramente papillas de pienso para gatos, bien molido con agua y alternar los biberones. La comida húmeda y blanda, específica para gatos también son una buena opción.

Acorde avance el tiempo, se irán dejando atrás las mamaderas de leche y se irán dando con más frecuencia las comidas.

La higiene es otro punto importante que abordar. La gata madre suele estimular a sus gatitos lamiéndoles la pancita para que defequen u orinen, para simular este acto podemos utilizar toallitas húmedas.

La manera correcta de hacerlo de forma delicada, masajearle la guatita y su parte genital durante unos pocos minutos después de media hora de haberlo alimentado.

Lo más recomendable para evitar la suciedad es poner un trapo o ponerlo directamente sobre el arenero para crearle un hábito.

Si el gato no hace sus deposiciones entre las 24 y 48 horas, debemos recurrir al veterinario de inmediato.

Cuidar de un gato pequeño requiere muchos cuidados, es complicado y requiere gran responsabilidad, si deseas hacerte cargo de uno debes tener presente todos estos cuidados especiales que necesita y sobre todo tiempo.

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