Los vómitos ocasionales son un problema bastante común en el gato y no tiene porqué ser grave. Pero si estos vómitos se vuelven más frecuentes pueden ser el síntoma de una patología más grave y tienes que llevar a tu gato a un veterinario de inmediato.
El vómito es un acto reflejo que provoca la eliminación activa a través de la boca del contenido digestivo, especialmente de la comida que se encuentra en el estómago. Es importante no confundir el vómito de la regurgitación que es un rechazo pasivo, sin contracciones activas del abdomen, de comida no digerida o de saliva.
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Gestos de emergencia
Si tu gato está vomitando y su nivel de consciencia está alterado, vigílalo y ten cuidado que no haya paso de contenido digestivo hacia las vías respiratorias. Aléjalo del material digestivo expulsado, límpiale la boca y las vías respiratorias para que no se quedes obstruidas, teniendo cuidado que no te muerda o te arañe.
Si el gato que vomita es adulto y en buen estado de salud, sin ningún otro síntoma y no deshidratado, puedes ponerle a dieta de 12 a 24 horas, dale agua en pequeñas cantidades poco a poco. Pero ojo, en ciertas circunstancias, un ayuna prolongado es malo, especialmente en gatos que padecen obesidad. Descubre en Happy Cat cómo elaborar una dieta blanda para gatos.
En todo caso vigila el estado de tu gato durante les 24 a 48 horas que siguen el episodio de vómito. Si vuelve a vomitar o si el estado general de tu gato empeora, llévalo de emergencias a tu veterinario.
Actuar según la causa
Observar el contenido rechazado es importante para determinar la gravedad y permite orientar tu veterinario sobre la causa. El contenido expulsado puede ser: alimentos no digeridos, líquido gástrico, líquido biliar (amarillento o verdoso), sangre ( de color rojo vivo o marrón si es sangre digerida), cuerpos extraños, plantas, tricobezoares ( bolas de pelo).
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Bolas de pelo
Una de las causas más comunes es la formación de tricobezaores o más comunmente conocidas como bolas de pelo: al acicalarse tu gato ingurgita una gran cantidad de pelo que luego forma una bola en su sistema digestivo, generalmente es luego expulsada en forma de vómito. Para solucionar este tipo de vómito puedes cepillar a tu gato, recuerda que es especialmente importante realizar un buen cepillado en las razas de pelo largo, además puedes dar valeriana a tu gato, la valeriana es una planta que tu gato puede comer y le ayuda a purgarse.
Comió muy rápido
Puede ser simplemente porque tu gato ha comido mucha cantidad demasiado rápidamente y su estómago no ha tenido tiempo de digerir la comida y necesita expulsarla. Si la comida no ha llegado al estómago sino solamente al esófago antes de expulsarla se trata de regurgitación. En todo caso si tu gato come demasiado rápido debes racionarle la comida y darle porciones pequeñas pero más frecuentes, vigilando que come con calma masticando correctamente.
El estrés
Otra causa de vómitos en los gatos es el estrés: los felinos son animales muy sensibles al cambio, que sea un cambio de entorno o un cambio alimentario, esto les puede poner en estado de estrés ligero o grave. Si te has mudado, has hecho obras recientemente en tu casa, has cambiado su comida o has adquirido otra mascota desde hace poco, puede que tu gato este estresado y que sea esa la causa de sus vómitos. Para ayudar a tu gato puedes asegurarte que tiene un espacio seguro y tranquilo en el cual refugiarse cuando quiere estar tranquilo, en cuanto a la comida los gatos prefieren comer de 15 a 20 pequeñas raciones al día: dejale su cantidad diaria a libre disposición. Si no consigues ayudar a tu gato estresado puedes consultar un veterinario comportamentalista que podrá aconsejarte el uso de feromonas u otros medicamentos para tu gato.
Intolerancia a algún alimento
Si se trata de vómitos frecuentes con o sin diarrea, sin pérdida de apetito ni otros síntomas, la causa puede ser una intolerancia alimentaria o una gastritis aguda o crónica. Si crees que esa es la causa, puedes poner tu gato en ayuno 24 horas y si sigue vomitando debes llevarlo a tu veterinario para que haga un diagnóstico y de a tu gato un tratamiento adecuado. Si vas a poner a tu gato en ayunas 24 horas vigílalo mucho porque la ausencia de comida demasiado tiempo puede provocar cambios de la flora intestinal nefastos, así que se muy prudente, lo mejor siempre sería llamar a tu veterinario primero antes de realizar cualquier cambio.
Una intoxicación
Otra causa puede ser una intoxicación: intenta pensar si tu gato ha ingerido un alimento anormal que no le era destinado, si sospechas de una intoxicación llama a tu veterinario de inmediato y explícale la situación, te podrá aconsejar específicamente según el tipo de toxicosis. Descubre algunas de las plantas tóxicas para gatos y descarta que puedas tenerla en tu hogar.
Otra patología más grave
Si los episodios de vómitos se acompañan de otros síntomas como la pérdida de apetito, fiebre, diarrea sanguinolenta, constipación, es que la causa es probablemente una patología más grave: puede deberse a parásitos, diabetes, leucemia o cáncer. Apunta todos los síntomas para ayudar a tu veterinario en su diagnóstico.
Siempre es útil tomar la temperatura de tu gato, idealmente no debe superar los 39 grados, observa bien tu gato para detectar posibles alteraciones neurológicas como vértigos, convulsiones, alteraciones de la consciencia. Una aumento de la sed, celos recientes en una gata o trastornos urinarios son elementos importantes para diagnosticar la causa del vómito.
Este artículo es meramente informativo, en Happy Cat no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
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