PERROS PIDIENDO COMIDA

¿Les resultan familiar unos aullidos lastimeros, trompas posadas en la pierna, o palmaditas con las patitas? Los perros harán cualquier cosa para llamar tu atención al pedir comida. Hay muchos animales domésticos y otros que no lo son tanto que hacen esto, como vacas, cerdos, caballos e incluso palomas.

Comer cerca de un animal puede ser tan gracioso como incómodo. A continuación veremos algunas de estas situaciones:

Te miran a los ojos y luego al piso

No existe algo más triste que los ojos de un perro, suplicándote que le tires un pedazo de eso que estás comiendo. Los mamíferos tienen gestos que nos resultan muy llamativos, y gran parte de nuestra comunicación con ellos se basa en la manera en que los identificamos. Ya sea temor, alegría curiosidad u otros, los mamíferos son capaces de expresárnoslo a través de sus ojos, y cuando tienen hambre lo más probable es que te lo hagan saber.

Babas

La infaltable saliva, esto puede ser tan gracioso como desagradable, aunque no todos babean al pedir comida, esto varía dependiendo de la raza.

Aullidos y gruñidos

Uno de los elementos que ha persistido en la comunicación entre las personas y los perros son los ladridos y aullidos.

Por lo tanto tu perro aullará, gruñirá o ladrará para indicarte que está interesado en lo que estás comiendo. Básicamente esta es una de las costumbres que más perturba a los dueños de mascotas, sin embargo es una conducta que puede ser corregida.

Te tocan o se te suben encima

El hecho de subirse encima es más común en los gatos, que no suelen tener el rol de sumisión de los perros. Los perros suelen poner su cabeza en tus piernas y mirarte directo a los ojos con carita de “me estoy muriendo de hambre”, tiernos en general.

Cómo evitar esta conducta

Es sabido que muchas de las costumbres que tienen nuestras mascotas, son adquiridas o aprendidas por malos procesos de enseñanza. La manera más efectiva para evitar que tu perro pida comida es sencillamente no darle, jamás. Al darle comida mientras estás en la mesa o disfrutando algún snack le estás dando a entender que estos espacios son propicios para que él reciba alimento, por lo tanto empezará a usar todos los recursos que tiene con tal de obtenerlo. El problema con esta conducta es que termina volviéndose molesta y, una vez adquirido el hábito, es muy difícil de eliminar por completo.

Por lo tanto lo que te recomendamos es que llegues a un consenso con tus familiares y con las personas que visitan tu casa, en el que les indiques que no está permitido alimentar a tu mascota. Además de esto podrás llevarle una dieta mucho más controlada, lo que le hace bien a su salud.